Ficha técnica
Título: “The Social Network” (“La Red Social”)
Dirección: David Fincher
Guión: Aaron Sorkin, basado en el libro “The Accidental Billionaires”, de Ben Mezrich
País: Estados Unidos
Año: 2010
Género: Drama
Actores y personajes: Jesse Eisenberg (Mark Zuckerberg), Andrew Garfield (Eduardo Saverin), Armie Hammer y Josh Pence como doble de cuerpo (los gemelos Cameron y Tyler Winklevoss); Max Minghella (Divya Narendra), Rooney Mara (Erica Albright) y Justin Timberlake (Sean Parker)
Duración: 2 horas
*Datos adicionales: Ganó 4 Globos de Oro, de la Asociación de Prensa Extranjera en Hollywood, por mejor director (David Fincher), mejor película de drama, mejor música original y mejor guión de cine (Aaron Sorkin)
Poster in Spanish of 'The Social Network' |
La sinopsis
Una noche de otoño del 2003, luego de que su novia lo corta, alegando que salir con él es como “estar saliendo con una caminadora eléctrica”, el genio de programación y estudiante universitario de Harvard, Mark Zuckerberg, se sienta frente a su computadora en su dormitorio en el campus escolar y comienza a trabajar de manera apasionada en una nueva idea que se le ocurre al calor del momento. Lo que él comienza en esa noche pronto se convertirá en una importante red social global que cambiará de manera radical la comunicación por Internet.
Esta es la historia de cómo Mark Zuckerberg se convirtió en el multimillonario más joven de la historia gracias a “Facebook”, y como en el transcurso de los seis años en los que desarrolló la idea de esa red social para finalmente hacerla realidad, él pasó por serias complicaciones: Ganó amigos, perdió otros, comenzó a hacer dinero para después ser demandado hasta por una persona bastante cercana a él. Un repaso a un aspecto de la sociedad, en una época en donde la comunicación por Internet ha adquirido impresionantes niveles de demanda popular.
La crítica
“La red social” (“The social network”) se antoja como la película quizá más obligada del siglo 21. No solo porque cuenta la historia sobre la red social más relevante del momento, sino porque muestra además una faceta del ser humano en plena era digital y de cómo se ha visto influenciado (y afectado quizá) en lo social y lo cultural, por la comunicación a través del Internet. A tal grado de que el invento que a un inquieto joven universitario se le ocurrió casi a manera de berrinche, en cuestión de pocos años se llegó a convertir en una empresa actualmente valuada en 25 billones de dólares.
El guión fue adaptado de manera estupenda por Aaron Sorkin, basándose en el libro “The Accidental Billionaires”, de Ben Mezrich. Aunque el autor del texto, Ben Mezrich, admitió que nunca habló con Mark Zuckerberg (él no aceptó sus numerosas peticiones para una entrevista), Mezrich se basó en los testimonios de las personas relacionadas directa e indirectamente en el desarrollo de la notoria red social conocida como “Facebook”.
En el proceso de adaptar el libro a guión de cine, Aaron Sorkin (quien también fue el escritor de la teleserie “The West Wing”), también recurrió a las declaraciones legales efectuadas por Zuckerberg y quienes lo demandaron: Su antiguo socio Eduardo Saverin, así como los hermanos y estudiantes universitarios Cameron y Tyler Winklevoss, y el compañero de ellos Divya Narendra.
Como resultado Sorkin escribió un excelente guión, repleto de diálogos tan afilados que logran acaparar la atención del espectador y mantenerlo atento a todo lo que ocurre en la pantalla. De los elementos que funcionan a favor de este filme sin duda el guión es uno de ellos, ya que cabe notar que a pesar de que nadie resulta lesionado o muerto en el transcurso de la película (vamos, ni siquiera una gota de sangre se derrama en todo el filme), la película contiene tanto suspenso como la más envolvente historia policiaca.
Como muestra está la excelente y reveladora escena inicial, una conversación entre Mark Zuckerberg (Eisenberg) y su novia Erica Albright (Rooney Mara) en un bar cerca del campus universitario. La guapa Erica casi lucha como un maratonista que se arriesga a ser dejado atrás, por mantener el hilo de la conversación con Zuckerberg, quien la bombardea con diferentes tópicos, uno tras otro (y a veces todos a la vez), siendo el más importante quizá el de hacer algo para ser aceptado en los populares clubes de la universidad. Dentro de la plática Zuckerberg sin notarlo termina ofendiendo a su novia de tal manera, que ella lo manda al diablo y decide no volverlo a ver.
Este singular evento detona una serie de sucesos que de manera gradual llevan a Zuckerberg primero a cocinar la idea de la red social hasta finalmente realizarla. Con el ego lacerado Zuckerberg corre hasta su dormitorio en el campus universitario, se sienta frente a su computadora y tras ventilar algunos comentarios venenosos en su blog destinados a herir a su ahora ex novia, Zuckerberg procede a crear, por pura diversión, un sitio para comparar a la muchachas universitarias y calificarlas por grado de más bella y sexy. Para ello recurre a la ayuda de su entrañable amigo Eduardo Saverin (Garfield) a quien le pide su ecuación para calificar a jugadores de ajedrez.
Ese primer intento lleva por nombre “Facemash” y en una sola noche, debido a la gran multitud de visitas virtuales (hits) que recibe, Zuckerberg provoca que se caiga la red universitaria. Este acto lo lleva a recibir un somero castigo por parte de las autoridades escolares, pero al poco tiempo, lo contactan los gemelos Cameron y Tyler Winklevoss (ambos interpretados de manera excelente por Armie Hammer, con Josh Pence como doble de cuerpo para uno de los gemelos, a quien le “plasmaron” encima el rostro de Hammer por medio de efectos visuales). Los hermanos le proponen a Zuckerbeg la idea de una red social para Harvard y lo dejan a él para que la desarrolle. Zuckerbeg acepta.
Lo que se ve inmediatamente después son las declaraciones de Zuckerberg, Eduardo Saverin, los gemelos Winklevoss y sus respectivos abogados, efectuadas años después. Las reuniones legales se ven intercaladas con los eventos del surgimiento de la red social, conforme fueron ocurriendo. De esta forma, la historia salta del presente al pasado y viceversa, atrapando de manera ingeniosa la atención del espectador.
Otro aspecto notable de la cinta son las excelentes actuaciones de un sólido elenco liderado por Eisenberg, quien muestra a Zuckerberg como una especie de antihéroe para la era digital, un cretino que cae bien por su ingenio y por su manera tan críptica de hacer las cosas, al grado de que uno realmente no sabe cuál es la verdadera motivación detrás de cada acto que realiza: ¿Acaso Zuckerberg creó “Facebook” por puro despecho? ¿O tal vez fue como una forma de reconquistar a su ex novia Erica Albright, o por lo menos ganarse su respeto? ¿Realmente no le importa el dinero? Por mencionar algunas de las interrogantes que el Zuckerberg del genial Eisenberg levanta en el desarrollo de la historia.
Otras actuaciones memorables son las de Andrew Garfield (Saverin) y Rooney Mara (Erica, quien en realidad aparece poco pero su participación en la cinta es contundente), quienes en cierto modo le aportan una “alma” al filme; los únicos personajes con conciencia dentro de un desfile de personajes insensibles, que al parecer sólo les interesa el dinero o utilizar la comunicación por Internet como un medio más para enriquecerse (o volverse popular), que para en realidad acercar más a los humanos unos con otros.
La música y la edición fílmica son empleados también de manera efectiva y brillante en la dirección impecable de David Fincher (“El Club de la Pelea”, “Zodiac”), quien logra con “La red social” su filme más audaz y memorable desde “Seven”.
Por último cabe mencionar que “La red social” también deja al espectador con un mensaje que sugiere una reflexión sobre la Humanidad en el siglo 21: ¿Acaso nos hemos vuelto tan incapaces de comunicarnos entre nosotros mismos, que preferimos encender una computadora, conectarnos al Internet y ventilar en la red todo sobre nosotros, en lugar de hacer lo mismo, pero ante otro ser humano en carne y hueso?
Calificación: * * * *